Ese eco
Soy estela de luz que se disuelve
Al conjuro de la sombra con la aurora
Un canto de gorrión que se adormece
En un nido que pende de un ciruelo
Solitario vergel en un patio trasero
En el que cae la lluvia, en riego tempranero
Soy tan solo remedo de una ilusión infante
Deslucida comparsa de una estrella triunfante
El rosal que se yergue en un campo sin flores
Mariposa perdida entre viento y rumores
Soy el eco de un verso en que vivo rezando
Un beso delincuente que se quedó temblando
En un rostro negado a expresar sus amores
Soy el eco de un canto que retumba en el muro
Ese eco de quejumbre, es canto de cenzontle
Que letra me transforma y a versos, me… derrumba.
Yolanda Arias Forteza
Debe estar conectado para enviar un comentario.