Lamento
Si una lágrima brotara
Del fondo del corazón
Cuando derramo mi llanto
Porque no tengo tu amor,
De rojo te mancharía
Y todo el mundo sabría
Que, desangrado, sediento,
Ya te ha tocado el Amor,
Si la noche te encontrara
Buscando en el firmamento
La señal de que un lucero
Sólo por ti resplandece,
Mi amor es que, en la distancia,
Te está diciendo… ¡Te quiero!
Es mi amor, que está esperando
Que te me entregues entero.
Si alguna vez en tu sueño
Un sollozo te despierta,
Es el mío que ahí en tu pecho,
Pensó que estaba la puerta
Para escaparse y dejarte
Un suspiro y una queja,
Y remover en tu mente
Mi recuerdo con sorpresa.
Si cuando tiembla mi alma,
Trémulo te estremecieras,
Si sollozara tu pecho,
Cuando se quiebra mi voz,
Que la distancia, supiera,
No ha superado mi ausencia.
Segura de que aún me piensas,
Mi alma no sufriría
Porque cierta así estaría
De que percibes mi amor,
Que mi quebranto es tu llanto
Y que lamentas también
El habernos encontrado,
El enlazar nuestras manos,
Hasta habernos conocido y…
¡No haber nacido, a tiempo!
Yolanda Arias Forteza
Octubre 7, 2003
Reflexiones
Los poemas no son quejas, son reflejos
de sucesos que esquivos se nos alejan.
Reflexiones insistentes de razón
y sentimiento, ideas en abecedarios
estructurados, precisos, en diferentes
lenguajes, que se entienden por igual,
Poemas, incas o aztecas con su belleza
ancestral recama de sentimientos
en alarde colosal, trascendentes
en el tiempo, reciclando los momentos
de toda la humanidad. Nada cambia,
sólo el tiempo que nos va dejando atrás,
en diversas envolturas, y diferentes culturas,
todas presas en los ritos,
los credos y las costumbres. Humanos,
en nuestro andar, poesía, verso, rima, prosa;
estrofas todas de vida, que alguno debe cantar.
Es inquietud perentoria de trascender en la letra,
como único testimonio de belleza.
Destemplanza, de todo lo que sentimos
y que a veces presentimos; mas, debiéramos callar,
la importancia de un momento que nos toca el corazón.
Es el alma que lo canta, el poeta, su… juglar.
Yolanda Arias Forteza
Junio 8, 2015, 20:20 hrs.
En susurro, te… canto
Nana, para mi bisnieto Iker Emmanuel
Un canto bulle en mí y se desborda
En la deshora de esta noche, insomne,
En la que aflora la ternura honda
Por ti, mi bien que dulce duermes,
Sin saber que mi vejez, te piensa ahora.
Bisabuela. Madre de tres generaciones,
Tres surcos largos en el calendario.
Consabidos eventos que repiten
En cíclico vaivén mis emociones.
El candor que renueva mis amores
Remedio para todos los dolores
En el que gira el universo entero
Testigo diario soy de los denuedos
En los que alerta tienes a tus flores,
Un Jazmín, dos Violetas en la tierra
que habito, y por fuerza se nutre
en la poesía. Una nana traduzco
en este verso, en susurro te canto,
como arrullo:
“… Duerme, duerme pedazo
de mi vida, cierra ya tus ojitos pispiretos
luceros en mi cielo, algodón de dulzura
tu mejilla, y tus labios las flores del cerezo,
Duerme, duerme, tu manita en mi mano
Mientras yo con mis ojos la carita, te… beso”.
Yolanda Arias Forteza.
Julio 11, 2016. 15:00 hrs.
Brujería
Llevo más de un año que constantemente
la boca te beso; dos fotografías en igual tamaño,
son testigo de eso. Dos jóvenes rostros
que se enamoraron cuando fueran viejos;
Más, a quien importa si no a mí que quietos
parezcan, solamente eso, prolijos retratos
en papel impreso. Rostros que tan juntos
Tan enamorados parecen espejo.
Los ojos, se miran las bocas se besan
La nariz unida en el mismo aliento,
en la frente noble igual pensamiento.
Es la brujería del deseo profundo
que en mi ser padezco, el fervor de mi alma
que en la boca rezo. Por eso no muero,
A esparcir eterno, en el universo el amor
sublime que yo te profeso.
A sepan que te amo, que constriño el alma
a un beso de alientos unidos por papel impreso.
¡Ah, qué desconsuelo! que no cesa nunca
y baña de mares amargos, salados, el rostro,
los labios sedientos, con los que te beso.
Yolanda Arias Forteza
Junio 14, 2016. 3:00
Breves Reflexiones de Tres Cuartos de Siglo
Sola camino en pos de un sueño irreverente
Hacia el inexorable evento, en reto permanente.
Inconfundible sensación de permanencia
En un vivir en que me creo inmortal
y en cruda realidad persiste y me somete
aferrada no a bienes, pero a ideales sublimes,
a retenes de crecimiento espiritual, de sumergirme
en la magia exquisita de la vida que me induce
a pensar que lo aberrante parte forma de andar
sobre la tierra. Portal, elijo así, para elevarme
en un plano sutil, agonizante, en el que todo pierde
relevancia en el que el alma pende de la instancia
de ser de la creación un punto ciego. Un átomo,
minúsculo, entre tantos y un universo autónomo
en esencia.
He arribado en edad abrumadora a un estadio
De luces y quimeras en que la irrealidad se magnifíca.
Lo pequeño es enorme y lo grande parece diminuto.
Tres cuartos de centuria justifican el que pueda
Expresar mis pensamientos en un foro que a nadie
Perjudica. Es la letra, conductora de mi esencia
del más puro y profundo sentimiento que violenta
y engrandece la emoción, la razón, la ignorancia
la sapiencia, que en mi alientan…En el verbo,Señor.
en la palabra proveíste a los mortales
de herramientas para volcar lo que sobresaliente
desborda del espíritu viviente que, sublime trasciende
de lo humano, en su búsqueda eterna del Nirvana.
Yolanda Arias Forteza
Julio 1, 2016, 13:12 hrs.
Ausencia
Poco a poco se ha ido fracturando
el dique del embalse de mis penas
y en quebranto y sollozo un llanto adulto
llora por ti en su voraz quimera.
Es esta ausencia eterna la que incide
en mente y corazón y desgobierna
la razón que tendría para olvidarte.
El pasado se fue, sin él no existes
y por eso me he dado a la tarea
de que vivas eterno en mi presente
y seas parte vital de mi rutina,
del pensamiento en que perenne existes.
Que fluya el llanto en mi, rompa
compuertas. No me he de conformar,
te voy a reencontrar cuando yo muera.
Yolanda Arias Forteza
Debe estar conectado para enviar un comentario.